La restauración de la Puerta de la Justicia, una de las entradas emblemáticas de la Alhambra, ha descubierto detalles decorativos nazaríes y técnicas artesanales únicas en el mundo, que se asemejan a la taracea granadina pero elaboradas con mármol y pizarra.

Canal Patrimonio_EFE

Alhambra_EFE

El Patronato de la Alhambra inició en octubre del pasado año las tareas de restauración de la Puerta de la Justicia que han revelado una técnica artesanal “de una gran pericia”, que no se había detectado antes en el monumento alhambreño. Este emblemático espacio, construido por el sultán Yusuf I en 1348, afronta la fase final de su rehabilitación, y la nueva técnica descubierta durante las tareas de limpieza se sigue investigando.

La directora del Patronato de la Alhambra, María del Mar Villafranca, ha destacado que la restauración ha sacado a la luz “materiales y colores que estaban ocultos y nos ha puesto en contacto con piezas únicas que detallan unas técnicas artesanales exquisitas y refinadas en epigrafías o lazos vegetales que ayudan a conocer más cómo era la Alhambra” en los siglos XIV y XV. Las obras de restauración se han centrado en la fachada interior para limpiar sus columnas, el arco y el lienzo de piedra, junto a otros elementos como un paño de “sebka” o una hornacina y la fachada exterior, que se ha detenido en los elementos de piedra y pintura mural que simula ladrillo.

El arquitecto conservador de la Alhambra, Francisco Lamolda, ha explicado que durante la actuación han aparecido “sillares distintos cromáticamente que le aportan una gran belleza”, junto a la epigrafía de taracea labrada en mármol blanco, con incrustaciones de pizarra. La técnica descubierta se realizó en el mármol blanco, que se talló para colocar en sus huecos pizarra tallada para resaltar las inscripciones entre ambos colores y se utilizó además en la mano de Fátima, aunque no se conservan todos los trazos. La lápida recuperada durante la restauración corrobora la fecha de inauguración de esta entrada a la Alhambra, que mezcla la llave y la mano de Fátima, con un valor musulmán, y la figura gótica de la Virgen y el Niño colocadas por orden de los Reyes Católicos sobre la gran lápida, que contiene la inscripción árabe fundacional de la puerta por encima de la llave.

La intervención ha costado 47.133 euros, se ha desarrollado por un equipo multidisciplinar, y los andamios aún colocados se retirarán antes del Sábado Santo, fecha en la que la Virgen de la Alhambra pasará por su arco en su trayecto procesional. Villafranca ha adelantado que el Patronato afronta otras obras menores con el reto de intervenir en Torres Bermejas para incorporarlo al patrimonio alhambreño.

 

IMAGEN: Un momento de la restauración de la Puerta de la Justicia, una de las entradas más emblemáticas de la Alhambra, que ha descubierto detalles decorativos nazaríes y técnicas artesanales únicas en el mundo. EFE