Los andamios han regresado a varios pilares del Acueducto de Segovia, un monumento declarado por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, con el fin de retirar un antiguo canal de plomo y evitar filtraciones que dañaban la piedra de una zona restaurada en la época de los Reyes Católicos.

Canal Patrimonio_EFE

acueducto_Segovia_EFE

Según ha explicado la concejala de Patrimonio y alcaldesa en funciones de Segovia, Claudia de Santos, también se quitará el canal de plomo en el último arco junto al Postigo del Consuelo, igualmente afectado por la humedad, y se impermeabilizará. Además se aprovechará el proyecto para tratar de eliminar el anidamiento de palomas en la plaza de Día Sanz, a base de introducir piezas de granito entre las juntas, ya que la acidez de los excrementos de estas aves produce importantes daños a los sillares de la obra romana.

Aunque hoy se han colocado varios andamios en las zonas que han sido establecidas por la urgencia, los trabajos no se iniciarán hasta mañana, martes, con un plazo de ejecución de tres meses y un coste de unos 30.000 euros, financiados por Bankia, tras la firma de un convenio con el Ayuntamiento. La última restauración completa, llevada a cabo por la Junta de Castilla y León, afectó a los cerca de 25.000 sillares del monumento, con un presupuesto entonces de 932,3 millones de pesetas -unas 40.000 pesetas por sillar-, de los que 300 millones fueron aportados por la Fundación Caja Madrid.

Además de la limpieza exterior de unos 10.000 metros cuadrados del frente del monumento, se sellaron fisuras en unos 5.000 sillares y otros 725 han sido rellenados y sometidos a un cosido de su laja superficial. También fueron consolidados cerca de 800 sillares que estaban muy arenizados; mientras que se unieron con bulones de fibra de vidrio otros 190 que estaban partidos.

 

IMAGEN:  Varios andamios han sido colocados hoy en los arcos de una sola fila del Acueducto de Segovia, declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, en la plaza de Día Sanz, para proceder a la impermebialización del canal de piedra y evitar humedades que afectan a algunos sillares. EFE