El retrato de Miguel de Lis, que ha estado perdido en el desván de un piso de Madrid, ha vuelto al Museo Casa Lis de Salamanca, el inmueble que construyó a principios del siglo XX en las cercanías de la catedral salmantina, donde ha vuelto cien años después de que familiares se llevaran el cuadro.
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Así lo han explicado hoy descendientes de Miguel de Lis, quienes han informado de la donación realizada, un cuadro con el retrato del creador de esta casa, que en 1995 se convirtió en el Museo de Art Nouveau y Art Decò de Salamanca. El alcalde de la capital salmantina, Alfonso Fernández Mañueco, ha mostrado su satisfacción por esta “donación” que se hace a uno de “los referentes nacionales e internacionales de la ciudad de Salamanca“, como es el Museo Casa Lis. El alcalde también ha efectuado un reconocimiento a las tres personas que han hecho posible que este museo sea una realidad: el ideólogo de inmueble, Miguel de Lis, “un industrial avanzado para la época que vivió“; Manuel Ramos Andrade, un anticuario salmantino que cedió su colección de obras de Art Nouveau y Art Decò; y el director Pedro Pérez Castro, “por lograr que este Museo sea un referente cultural“. La pintura que ha sido donada por dos bisnietas de Miguel de Lis toma como modelo su propia fotografía, que realizó el fotógrafo salmantino Venancio Gombau. Aunque el lienzo “no es de gran calidad” y el caballete que lo sujeta “no estaba en buenas condiciones“, tal y como ha reconocido el director de la Casa Lis, Pedro Pérez Castro, la donación es “muy importante ya que se recupera un momento que pertenece a la historia de esta casa y desde hoy a la historia de Salamanca“. La restauración de la obra, que ha costado 1.700 euros, ha sido realizada gracias a la financiación de la Asociación de Amigos de la Casa Lis.
IMAGEN: El alcalde de la capital salmantina, Alfonso Fernández Mañueco, posa junto a descendientes de Miguel Lis, durante la presentación hoy del retrato. EFE.