Descubrir otra Alhambra, esa que recogen las decenas de miles de registros que atesoran su archivo y su biblioteca, ha sido posible con motivo del Día Internacional de los Archivos y la apertura al público de las nuevas instalaciones que albergan sus valiosos fondos y colecciones documentales.

Canal Patrimonio

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No muy lejos del famosísimo Patio de los Leones o de las fuentes que riegan el Generalife, el Patronato que gestiona el recinto monumental más visitado de España ha invertido un montante que, en diferentes fases, ha superado los 1,5 millones de euros para modernizar y hacer más accesibles su biblioteca y su archivo.

Dotada con tecnología de última generación, esta infraestructura cuenta con sensores de temperatura, humedad, sistema contraincendios o estanterías móviles automáticas para garantizar la custodia, conservación y protección de fondos de gran valor, que aportan información esencial sobre la memoria del monumento y su gestión. “Aquí puede verse un monumento distinto, los visitantes descubren otra Alhambra”, ha explicado durante una visita guiada la jefa de sección de la Biblioteca y Archivo, Bárbara Jiménez.

La importancia de los fondos, que destacan no sólo desde un punto de vista cuantitativo sino sobre todo cualitativo, radica en que en estas instalaciones se encuentran las fuentes donde documentar cada una de las intervenciones ejecutadas en el recinto nazarí, ha añadido Jiménez. A través de dos salas de investigadores, los usuarios pueden acceder a la descripción de fondos, colecciones y recursos digitales, entre los que se encuentran planos, fotografías, grabados, dibujos, postales o carteles. También está disponible el catálogo en red Idea, recursos del Fondo Romanones, revistas digitales y cuadernos de la Alhambra.

Piezas destacadas

Archivo Alhambra

Entre esos recursos destacan el Fondo de Capitanía General del Reino de Granada y Alcaidía de la Alhambra, Fondo Ángel Barrios, Escribanía de la Alhambra, Santa María de la Alhambra y el Fondo Patronato de la Alhambra y Generalife. Entre otras curiosidades, se puede ver una entrada de la Alhambra de 1909, cuando acceder al recinto valía una peseta, el primer cartel que se hizo para regular los diferentes tipos de visita o documentación con siglos de historia.

Es el caso de una carta original de censo perpetuo de 1499, dada por fray Fernando de Talavera, arzobispo de Granada, o una cédula original, de 1520, de Carlos V a su primo el duque de Arcos por la que daba cuenta del próspero viaje que había hecho y de lo bien que se le habían presentado todos sus negocios, tanto los de su coronación imperial como los de su “real Estado”. El Patronato trabaja además en la progresiva digitalización de sus fondos y ya permite acceder por ejemplo a su colección completa de planos, ha detallado por su parte la directora de la Alhambra, Mar Villafranca.

“Estas instalaciones se convierten en núcleos de información y en ventanas al conocimiento”, ha destacado Villafranca, quien cree que esta infraestructura “suma historia y contemporaneidad” y ha avanzado que la Alhambra pretende establecer futuras alianzas con otros archivos que dispongan de documentación destacable para el conocimiento del monumento. Las tareas de custodia de los fondos se completan asimismo con un avanzado taller de restauración, donde especialistas intervienen casi con precisión quirúrgica cada uno de los documentos, que constituyen en definitiva las entrañas y la memoria de un monumento que descubre así perspectivas desconocidas para muchos. EFE_Roberto Ruiz Oliva

IMÁGENES:  Técnicos trabajan en algunas de las obras que se encuentran en las nuevas instalaciones del Archivo y la Biblioteca del Conjunto Monumental de la Alhambra y la directora del Patronato de la Alhambra, María del Mar Villafranca (d), acompañada por la jefa de sección de la Biblioteca y Archivo, Bárbara Jiménez, durante la visita realizada a las nuevas instalaciones del Archivo y la Biblioteca del Conjunto Monumental nazarí. EFE