Para las galerías que participan en la 33 edición de ARCO un buen resultado sería lograr “un treinta por ciento más de ventas” que en 2013, aunque Alberto de Juan, presidente del Consorcio de Galerías de Arte, recuerda que los negocios que se cierran en estas ferias son “caminos de larga distancia”.

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Alberto de Juan, en una entrevista con Efe cuando faltan tres días para una nueva cita con la feria madrileña de Arte Contemporáneo, considera que, en esta ocasión, “hay motivos fundados  en el sector para respirar un mayor optimismo” que en anteriores ediciones. Así, recuerda que el último trimestre del 2013 se notó en el mercado artístico cierto movimiento que se echaba de menos en periodos anteriores, un elemento positivo al que se ha añadido, en las últimas semanas, la decisión del Gobierno de bajar, justo antes de ARCO, el IVA para la adquisición de obras de arte del 21 al 10 por ciento.

“Indudablemente, esos factores generan muchas expectativas para esta feria”, según De Juan, quien considera que el problema del IVA en el mundo del arte está derivado de la relación de España con el resto de la Comunidad Europea; “el principal escollo es que estamos a años luz” de ellos. El presidente del Consorcio de Galerías de Arte lamenta que el IVA para obras de arte en la UE sea absolutamente caótico, y denuncia que venden una supuesta igualdad fiscal que no es tal y que -asegura- deja a España aislada en el ámbito internacional si no puede competir en igualdad de condiciones con el resto de países europeos.

En este sentido, recuerda que los desfases eran de tal nivel que se podía ir a Reino Unido o Francia e importar una obra de arte con un IVA “del 5 por ciento, mientras que en España estabas pagando el 21 por ciento”, una situación que se ha solucionado parcialmente gracias a las presiones del sector ante el Ministerio de Hacienda pero que, según el galerista de Max Estrella, sigue sin poner en pie de igualdad a las galerías nacionales con las extranjeras.
Pese a todo, reconoce que probablemente estemos “ante la mejor edición de ARCO de los últimos dos o tres años, algo a lo que ayudan -recuerda- no solo la bajada de impuestos sino una mejor situación coyuntural de la economía y el esfuerzo de la feria por atraer a los coleccionistas internacionales”.

Oídos sordos ante las críticas:

Para el galerista, las críticas hacia la rebaja de la fiscalidad en el sector artístico por parte de quienes lo consideran un mercado de lujo son de una simplicidad enorme, y asegura que el mercado del arte es una industria cultural de la que viven miles de personas y de profesionales, y en el que hay una cantidad enorme de los llamados mileuristas. “Hablamos de competitividad, no de privilegio”, asegura el representante de los galeristas, quien subraya que Hacienda lo sabía y si ha rebajado el IVA ha sido “porque el mercado del arte estaba absolutamente desactivado por una cuestión de falta de igualdad, aunque -insiste- la pena es que haya dado el paso a medias”.

Alberto de Juan lamenta la demagogia que vende el mercado del arte como “un mundo de privilegiados y de ricos”, algo que -advierte- sitúa al sector profesional en una situación de franca indefensión. Según el representante de los galeristas, la aspiración para esta edición de ARCO es lograr vender un 30 por ciento más  que el año pasado, aunque recuerda que las operaciones son a largo plazo y que en una feria no solo se venden las piezas que están en el stand, por lo que el resultado es muy difícil de cuantificar.

Asimismo, recuerda que la inversión que supone ir a una feria de arte es muy elevada y que probablemente los primeros 70.000 euros de ventas solo valen para pagar los gastos del expositor, por lo que asegura que su sueño para ARCO sería “que el último día logremos haber pagado todos los costes del stand y al artista”.

Entre los artistas presentes en su galería, Max Estrella, estarán el brasileño Marlon de Azambuja o el madrileño Eugenio Ampudia, piezas exclusivas realizadas para la feria por Daniel Canogar, o de Bill Viola, aunque también contará con obra de artistas jóvenes como Jorge Perianes o Pablo Valbuena. “La idea es combinar arte emergente y más asequible con artistas de media carrera y otros más consagrados, que haya variedad y calidad para todos los bolsillos”, concluye.  EFE_Concha Carrón

IMAGEN:  Vista de unas galerías durante la XXXII edición de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo (ARCO) en enero de 2013. EFE/Archivo