ES* Como un navío acorazado, el castillo de Peñafiel se eleva sobre los cauces de los ríos Duero y Duratón en la provincia de Valladolid. Este antiguo punto estratégico entre los reinos peninsulares hoy es uno de los referentes vitivinícolas de Europa.

PT* Como um navio couraçado, o castelo de Peñafiel eleva-se sobre as bacias dos rios Douro e Duratón, na província espanhola de Valladolid. Este antigo ponto estratégico entre os reinos peninsulares é hoje um dos referentes vinhateiros na Europa.

Canal Patrimonio Flumen Durius

ES* El castillo de Peñafiel forma parte del complejo defensivo levantado a orillas del Duero en la época en la que el río era la frontera natural entre dos culturas antagónicas. Aunque existieron asentamientos prerromanos en la zona, la población que hoy conocemos como Peñafiel tiene su origen en las campañas repobladoras de principios del siglo X que afectaron a otros puntos del centro del Duero como Osma o Roa.

Se trataba de una localización estratégica en la confluencia de los ríos Duratón y Duero, dominada por un cerro fácilmente defendible. Esta idoneidad hizo que Peñafiel se convirtiese en cabeza de la jurisdicción del condado de Monzón, lo que no impidió que también fuese blanco de las razzias llevadas a cabo por Almanzor en territorio cristiano a finales de siglo.

Sin embargo, los musulmanes no tenían población con la que asentar los territorios conquistados. Este hecho, sumado a la retribución por el apoyo prestado por los condes de Castilla y de Saldaña al rey de Granada en las guerras entre los reinos moros de la Península, hizo que la fortaleza de de Peñafiel, junto a las de Sepúlveda, Maderuelo y Montejo, fuera cedida en pago a Sancho Garcés, con lo que finalmente ésta y sus alrededores pasaron definitivamente a manos del condado de Castilla.

El castillo de Peñafiel correspondería al conturbado siglo X en que la zona se encuentra en el epicentro de las disputas. De hecho, también los cristianos se vieron con dificultades para repoblar esta tierra, localizada en plena extremadura. En el siglo XIV, Sancho IV entregó al infante don Juan Manuel la villa y los recursos necesarios para construir el actual castillo sobre la fortaleza levantada trescientos años antes por el conde de Castilla.

Lo que hoy conocemos como el castillo de Peñafiel no es sino una muestra del llamado gótico germánico. Construido con piedra de Campaspero, sus dimensiones son 210 metros de largo, por 33 de ancho. El aspecto exterior de su muralla es liso y tiene una sola puerta que da acceso a una torre del homenaje de planta rectangular con más de 30 metros de altura coronada por ocho torrecillas. Y que divide el espacio interior del recinto amurallado en dos patios.

Museo del Vino

El aspecto actual del castillo se debe a dos grandes reformas llevadas a cabo en el siglo XV y en el XIX. La primera fue realizada por la familia Girón, a la que el futuro Enrique IV entregó el castillo como recompensa por su apoyo en la guerra civil, y que acondicionó su estructura para el uso de la artillería. Ya en 1838 el capitán general de Castilla la Vieja realizará obras de defensa y acondicionamiento en un edificio que fue declarado Monumento Nacional en 1917 y que actualmente es sede de la Fundación Museo Provincial del Vino de Valladolid.

El Museo Provincial del Vino se instaló en el Castillo de Peñafiel en 1999 y desde entonces recibe una media de 100.000 visitas al año. El horario, entre el 1 de octubre y el 31 de marzo, de martes a domingo, es de 10,30 a 14 horas, y de 16 a 18 horas. Del 1 de abril al 30 de septiembre abre por la mañana entre las 10,30 y las 14 horas, y de 16 a 20 horas por la tarde. Las tarifas dependen de si se quiere visitar sólo el castillo o también las dependencias del museo, variando de los 3,30 euros en el primer caso, a los 6,60 en general.

PT* O castelo de Peñafiel faz parte do complexo defensivo construído às margens do Douro, na época em que o rio era a fronteira natural entre duas culturas antagônicas. Apesar de haver assentamentos pré-romanos na área, o povoamento agora conhecido como Peñafiel tem sua origem nas campanhas de repovoamento no início do século X que também afetaram outras partes do centro do Douro como Osma ou Roa.

Era uma localização estratégica na confluência dos rios Duratón e Douro, dominada por uma colina facilmente defensável. Essa idoneidade fez com que Peñafiel se convertesse em cabeça da jurisdição do condado de Monzón, mas não impediu que também fosse alvo dos ataques realizados por Almançor em território cristão no final do século X.

No entanto, os muçulmanos não tinham população para consolidar os territórios conquistados. Este facto, juntamente com a compensação pelo apoio prestado pelos condes de Castela e Saldaña ao rei de Granada nas guerras entre os reinos mouros da Península, fez com que o Castelo de Peñafiel, junto com os de Sepúlveda, Maderuelo e Montejo, fosse transferido como pagamento ao conde de Castela, Sancho Garcés. Assim, finalmente a fortaleza e suas redondezas passaram definitivamente para mãos cristãs.

O castelo de Peñafiel foi construído no conturbado século X, quando esse território estava no epicentro das disputas. De fato, os cristãos também acharam difícil repovoar a terra, localizada em plena Extremadura ou fronteira. No século XIV, Sancho IV deu ao infante D. Juan Manuel a cidade e os recursos necessários para a construção do actual castelo sobre a fortificação construída trezentos anos antes pelo conde de Castilla.

O que conhecemos hoje como o castelo de Peñafiel é apenas uma amostra do chamado gótico germânico. Construído em pedra de Campaspero, suas dimensões são de 210 metros de comprimento por 33 de largura. A aparência exterior da sua parede é lisa e tem uma única porta que dá acesso a uma torre retangular de tributo de mais de 30 metros de altura, coroada por oito torres. A torre divide o espaço interior do recinto amuralhado em dois pátios.

Museu do vinho

O aspecto atual do Castelo é resultado de duas grandes reformas realizadas no século XV e no século XIX. A primeira foi feita pela família Girón, a quem o futuro rei Enrique IV deu o castelo como recompensa pelo apoio na guerra civil, e que o acondicionou para o uso da artilharia. Já em 1838, o Capitão Geral de Castela a Velha realizou obras de defesa e conservação em um edifício que foi declarado Monumento Nacional em 1917 e agora é sede do Museu Provincial do Vinho de Valladolid.

O Museu Provincial do Vinho foi criado no castelo de Peñafiel em 1999 e desde então recebe uma média de 100 mil visitas ao ano. O horário, entre 1º de outubro e 31 de março, de terça a domingo, é das 10h30 às 14h e das 16h às 18h. De 1º de abril a 30 de setembro, abre pela manhã, das 10h30 às 14h, e das 16h às 20h. O valor do ingresso depende da intenção de visitar apenas o castelo ou também o museu, variando de 3,30 euros no primeiro caso, aos 6,60 euros.