ES* En una época y en una región en la que la principal actividad económica era la ganadería, las apariencias ya contaban para demostrar el estatus social. Así surgió el Palacio de Gómara, uno de los tesoros arquitectónicos que la ciudad de Soria le debe a un ganadero de altas miras y bolsillo generoso.

PT*  No século XVI, em uma época e região nas quais a principal atividade econômica era a pecuária, as aparências já contavam para demonstrar o status social. Assim surgiu o Palácio de Gómara, um dos tesouros arquitectónicos que a cidade espanhola de Soria deve a um pecuarista de grandes aspirações e bolso generoso.

Canal Patrimonio Flumen Durius

ES*  El palacio fue construido en la segunda mitad del siglo XVI gracias a Francisco López del Río, un ganadero pudiente que incluso consiguió entrar en la nobleza comprando diversos títulos. En concreto, el título de conde de Gómara no fue suyo, pero sí de sus sucesores, que lo obtuvieron durante el reinado de Carlos II.

Aunque originalmente iba a tener un tamaño mayor, acabó por ser un edificio de proporciones considerables realizado con líneas puras y dos zonas diferenciadas.

El lado derecho del palacio cuenta con una torre coronada con acróteras, dos pisos con una galería de columnas corridas de orden toscano en su primera planta -doce arcos de mayor tamaño-, y de orden jónico en la segunda -veinticuatro arcos de menor tamaño-, y un patio interior castellano de orden jónico alrededor del cual se organizan las estancias. La parte izquierda tiene una fachada heráldica con el escudo de la familia sostenido por dos maceros y una serie de ventanales con frontones de estilo herreriano.

Cuatro columnas con base franquean la puerta adintelada de entrada, de aire manierista. Sobre ella se desarrolla una especie de friso con dos escudos ovalados y cuartelados, con líneas onduladas en el cuartel superior izquierdo, cinco estrellas en el cuartel superior derecho, cinco hojas vegetales en el cuartel inferior izquierdo y tres flores de lis en el cuartel inferior derecho. Los escudos, que se encuentran dentro de pergaminos rotos, se sitúan sobre las dobles columnas y bajo los maceros. Sobre la puerta hay un tímpano con dos putti que sostienen otro pergamino con una inscripción que deja constancia de la fecha de la obra y el propietario de la misma.

Heráldica

Ya en la zona superior de la fachada se despliega el impresionante escudo familiar sostenido por maceros y enmarcado en un pergamino roto, distribuido así: el cuartel superior izquierdo, cortado con líneas ondulantes horizontales en la parte superior y tres flores de lis en la inferior; el cuartel superior derecho con cinco estrellas en la parte superior y cinco hojas vegetales en la inferior; el inferior izquierdo, cuartelado a su vez con dos cruces de Calatrava y dos castillos; y el cuartel inferior derecho está partido con una torre en el lado izquierdo por cuya puerta entra un animal de cuatro patas, tres escudos de flores de lis y rematado en una cruz con flor de lis- y dieciséis veros en ondas. El escudo está rodeado por una bordura decorada con conchas y escaleras.

Sobre el escudo se eleva una torre de tres pisos por la que asoma una mujer con los ojos cerrados. Según la leyenda, se trata de la esposa de Francisco López, a quien mandó retratar como venganza por su gusto por mostrarse y hacer rondas. Cuenta con una inscripción que reza: “Non Nobis, Domine, Non Nobis, Sed Nomini Tuo Da Gloriam”, que puede traducirse como “No para nosotros, Señor, no para nosotros, sino para la gloria de tu nombre”.

La funcionalidad del palacio fue variando con el tiempo: primero para lo que nació, como vivienda señorial. Posteriormente fue un cine, la sede de la OJE (la Organización Juvenil Española en tiempos del Franquismo), y acabó siendo el Palacio de Justicia en la actualidad.

El monumento, que se conserva en un estado bastante bueno a pesar de los numerosos y variados usos que se le han dado, fue declarado Bien de Interés Cultural el 13 de Enero del año 2000.

PT*  O Palácio foi construído na segunda metade do século XVI, graças a Francisco López del Río, um rico pecuarista que conseguiu até entrar na nobreza ao comprar diversos títulos. Concretamente, o título de conde de Gómara não foi seu, mas sim dos seus sucessores, que o obtiveram durante o reinado de Carlos II.

Embora originalmente tenha sido planejado para ser ainda maior, o Palácio terminou por ser construído como um edifício de grandes proporções, realizado com linhas puras e duas zonas diferenciadas.

Seu lado direito, conta com uma torre coroada com acrotérios, dois andares, com uma galeria de colunas corridas de ordem toscana em seu primeiro andar – doze arcos de maior tamanho – e de ordem jónica na segunda – vinte e quatro arcos de menor tamanho – e um pátio interior castelhano também de ordem jónica ao redor do qual se organizam as estâncias. A parte esquerda tem uma fachada heráldica com o brasão da família sustentado por dois soldados com maças e uma série de janelões com frontões de estilo herreriano.

Quatro colunas com base ladeiam a porta alintelada da entrada, de ar maneirista. Sobre ela se desenvolve uma espécie de friso com dois brasões ovalados e quartelados, com linhas onduladas no quartel superior esquerdo, cinco estrelas no quartel superior direito, cinco folhas no quartel inferior esquerdo e três flores-de-lis no quartel inferior direito. Os escudos, dentro de pergaminhos rasgados, situam-se sobre as duplas colunas e sob os maceiros. Sobre a porta, um tímpano com dois puttis que sustentam outro pergaminho com uma inscrição que registra a data da obra e seu proprietário.

Heráldica

Na zona superior da fachada está o impressionante brasão familiar sustentado por soldados com maças e emoldurado num pergaminho rasgado, distribuído da seguinte forma: o quartel superior esquerdo, cortado com linhas onduladas horizontais na parte superior e três flores-de-lis na inferior, no quartel superior direito com cinco estrelas na parte superior e cinco folhas na inferior, o inferior esquerdo, quartelado por sua vez com duas cruzes de Calatrava e dois castelos; e o quartel inferior direito partido com uma torre no lado esquerdo, por cuja porta entra um animal de quatro patas, três brasões de flores-de-lis e arrematado numa cruz com flor-de-lis – e quatro barras onduladas de veys. O brasão está rodeado por uma borda decorada com conchas e escadas.

Sobre o escudo eleva-se uma torre de três pisos pela qual surge uma mulher com os olhos fechados. Segundo a lenda, trata-se da esposa de Francisco López, a qual mandou retratar como vingança por sua vontade de mostrar-se e fazer rondas. Conta com uma inscrição que diz: “Non Nobis, Domine, Non Nobis, Sed Nomini Tuo Da Gloriam”, que pode ser traduzida como “Não para nós, Senhor, não para nós, mas para a glória do teu nome”.

O uso do Palácio variou bastante com o tempo: primeiro serviu exatamente para o que foi construído, moradia senhorial. Posteriormente foi um cinema, sede da OJE, Organização Juvenil Espanhola, nos tempos de Franco, e, por fim, Palácio da Justiça, atividade que abriga até os dias atuais.

O monumento, conservado em bom estado apesar dos numerosos usos, foi declarado Bien de Interés Cultural no dia 13 de janeiro do ano 2000.