Inicia la primera fase de la restauración de la Catedral segoviana. Las obras, llevadas a cabo por la empresa Barzabales, buscan solventar los problemas de filtraciones recurrentes a consecuencia de desplazamientos de las tejas y erosión de la capa de compresión a lo largo del tiempo. El gasto, que asciende a 300.000 euros, será financiado en su totalidad por el Cabildo Catedralicio gracias a los ingresos de la venta de entradas.
Autor: Canal Patrimonio
La reconstrucción fue aprobada el pasado mes de diciembre por la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural de Segovia y se llevará a cabo a lo largo de cuatro meses. Los restauradores levantarán la cobertura de las tejas afectadas por la humedad y el mortero de agarre para proceder a la incorporación de material aislante e impermeabilizante. Las obras no modificarán ningún espacio de los 580 metros cuadrados que forman la zona, solo se busca hacer mantenimiento de esta.
Entre las partes que se van ha rehabilitar están las tres mansardas, ventanas destinadas a ventilar e iluminar, a través de su forrado. Por otro lado, se colocarán remates para amortiguar la caída de los restos que puedan dañar las estructuras, método ya usado en la restauración de la nave principal de 2014. Por último, se reforzarán las configuración aplicando capas de cemento extra para impermeabilizar mejor el edificio histórico. En el desarrollo de este proyecto de intervención se han tenido en cuenta las condiciones extraídas del Plan Especial de las Áreas Históricas de Segovia (P.E.A.H.I.S.) al que está suscrito la Catedral de Segovia. Con esto se verán finalizadas la intervención del conjunto de cubiertas.