El Macba dedicará hasta 2016 exposiciones al poeta y artista Joan Brossa, al fotógrafo Xavier Miserachs, al escritor argentino Osvaldo Lamborghini y a los arquitectos Ignasi de Solà-Morales y Enric Miralles, coincidiendo con la adopción de una nueva forma de trabajar en el museo.
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Según ha explicado el director del museo, Bartomeu Marí, esta nueva forma de trabajar se efectuará “interconectando las áreas de investigación y acción del museo con sus públicos”, y para ello se ha creado un equipo de investigación integrado por Beatriz Preciado y Valentín Roma. Preciado ha subrayado, en la presentación de la nueva etapa del museo, que “en los últimos años ha habido un cambio en la práctica del arte contemporáneo, y por tanto el museo debe adaptarse a esta nueva situación. Para ello el proceso de investigación debe estar en el centro de actuación del Macba”.
Para Preciado, aunque pueda parecer que el museo está en la periferia del mundo, “en realidad, el puerto de Barcelona está en el centro de debates como el colonialismo económico, y se puede pensar desde aquí la historia del capitalismo europeo”. El museo, apela Preciado, debe ser “un lugar de utopía, debemos pensar que vamos a reinventar la escena pública, aunque sea desde un microámbito”. Como consecuencia de las necesidades, el equipo directivo y asesor del museo ha definido seis líneas de investigación que estructurarán en los próximos tres años los proyectos expositivos y los programas públicos del Macba.
Emancipación política, estética, somática y sexual:
“No podemos continuar con los lenguajes de los años 1950”, ha dicho Preciado, para quien el Macba, con este cambio, pretende dar a entender el arte contemporáneo como “emancipación política, estética, somática y sexual”. El cambio de paradigma dará “una mayor visibilidad a una pluralidad de narraciones disidentes frente a los relatos historiográficos hegemónicos”. El museo, ha dicho por su parte Valentín Roma, debe ser el lugar donde “reaprender a escribir y pensar los vínculos entre arte y escritura”. En otra línea, atenderá las relaciones complejas entre arquitectura, arte, urbanismo crítico, producción de la ciudad contemporánea y la teoría de la cultura.
La nueva etapa, en la que el museo contará además con los edificios vecinos del Convent dels Àngels, La Capella y la propia plaza dels Àngels, se iniciará en abril con una exposición que reúne por primera vez las programaciones audiovisuales realizadas por Eugeni Bonet desde 1975 hasta el presente. A caballo entre 2014 y 2015, el Macba dará visibilidad a la olvidada obra de Carol Rama, que se extiende a lo largo de siete décadas (1936-2006). Rama cuestiona los relatos dominantes de la historiografía del arte con un trabajo que constituye un contraarchivo de los movimientos de vanguardia del siglo XX, ya desde sus primeras acuarelas de los años 30.
En los primeros cinco meses de 2015, el Macba presentará por primera vez en un espacio museográfico una amplia selección de los “collages” que el escritor Osvaldo Lamborghini realizó entre 1982 y 1985, mientras vivía prácticamente recluido en su casa de Barcelona. A mediados del próximo año, otra exposición investigará la dimensión poética y creativa de Joan Brossa a partir de dos lecturas radicales y en cierta medida excéntricas: la de Pedro G. Romero, que ha estudiado los vínculos entre Brossa y el flamenco; y la de Hans Ulricht Obrist, que mantuvo correspondencia epistolar con el poeta, dramaturgo y artista catalán.
El cambio programático del museo pasa, según Marí, por una nueva manera de financiación, que consiste en el mantenimiento de las aportaciones públicas y el aumento de los recursos propios por la vía de aumentar los visitantes y por una mayor participación del sector privado.
IMAGEN: El Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA) reunirá obras del poeta vanguardista catalán Joan Brossa. EFE/Archivo