El Ministerio de Cultura ha presentado los hallazgos de las campañas arqueológicas desarrolladas en el Monasterio de San Pedro de Arlanza en Hortigüela desde 2021. Las campañas ejercidas por el Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE) tienen el objetivo de investigar los orígenes de la edificación. La presentación ha corrido a cargo del jefe de Arqueología del IPCE, Juan José Gordón, y, a su término, se ha realizado una visita en la que ha participado el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro Luis de la Fuente.
El ministerio de Cultura, de la mano del Instituto del Patrimonio Cultural de España, ha presentado los hallazgos arqueológicos hallados en el Monasterio de San Pedro de Arlanza en el enclave de Hortigüela. Los descubrimientos, presentados en el mismo monasterio, han dado respuesta a la principal pregunta que rodeaba a la historia del monasterio: la posible existencia y ubicación del antiguo claustro, hoy desaparecido. El hallazgo de varias pruebas, como un negativo con la primera hilada de sillares o la reutilización de piezas románicas como molduras, han confirmado la hipótesis de los arqueólogos de que el templo pudo contar desde el siglo XI con un claustro románico de una sola planta, ubicado en el mismo lugar que el Claustro Mayor herreriano actual.
Por otra parte, se han finalizado las excavaciones de la muralla monástica descubierta en la campaña anterior. Una gran edificación que cubría todo el norte del recinto monástico y cuya información solo se conocía a través de antiguas fuentes escritas. Esta cerca perimetral daba acceso a la iglesia. Existen documentos que afirman que el monasterio estuvo rodeado por una muralla, por lo menos hasta el siglo XVI, de cinco torres: la de fray Pelayo al oeste, la de Doña Sancha en el extremo suroeste, la del Tesoro en el norte y las del Capítulo y del Conde en la fachada este.
Las actuaciones forman parte del proyecto arqueológico global que el IPCE está llevando a cabo en el monasterio desde 2021 y que nació de unas prospecciones de la zona. En 2022, en paralelo al estudio e interpretación de los resultados obtenidos, se intervino sobre la antigua hospedería del monasterio. Por último, en verano de 2023, se excavaron los cimientos y restos de la muralla medieval que rodeaba al monasterio. Los trabajos de esta ultima fase continuarán su desarrollo hasta finales de agosto con el estudio de los hallazgos recuperados, así como con el análisis y datación de los morteros empleados en la construcción tanto del claustro como de la muralla.