El Museo Nacional del Prado acoge durante los próximos nueve meses el Ecce Homo, una de las mayores obras del pintor italiano Michelangelo Merisi da Caravaggio. La obra, que fue creada entre 1605 y 1609, formó parte de la colección privada de Felipe IV y es una de las aproximadamente 60 pinturas conocidas del autor. “El Caravaggio perdido” permanece expuesto en una instalación individual especial desde el pasado 28 de mayo hasta el 13 octubre de 2024.
Fue en 2021 cuando el Museo del Prado informaba al Ministerio de Cultura sobre la importancia del cuadro tras su reaparición repentina en la casa de subastas Ansorena, en Madrid. La pintura, cuya firma, en un principio, todos asignaban a un alumno del artista español José de Ribera, pasaba a las manos de un nuevo propietario. Con las dudas sobre su autor, ese mismo año, la ilustración queda en custodia de la galería de arte Colnaghi, en colaboración con Filippo Benappi (Benappi Fine Art) y Andrea Lullo (Lullo Pampoulides).
La imagen se trata de uno de los mayores descubrimientos de la historia del arte, consiguiendo grandes avances en las técnicas de autentificación de obras . La acreditación estuvo a cargo de Claudio Falcucci, ingeniero nuclear especializado en la aplicación de técnicas científicas al estudio y conservación de patrimonio cultural, que evaluando los materiales y las técnicas de conservación confirmo que la autoría del cuadro pertenece al artista italiano. Tras esto, La restauración queda en manos del especialista Andrea Cipriani y su equipo, bajo la supervisión de expertos de la Comunidad de Madrid.
Además de la propia presentación del cuadro en el Museo del Prado, el préstamo conllevó también la edición de una publicación que explicase el contexto de la incorporación del Ecce Homo al registro de piezas creadas por Caravaggio. “Caravaggio: El Ecce Homo desvelado” contó con la participación de numerosos expertos que analizaron las circunstancias de su descubrimiento, la procedencia, los aspectos estilísticos, técnicos e iconográficos de la obra, su fortuna crítica y el legado dejado por el maestro en Nápoles.