Corría el año 1841 cuando se produjo el primer viaje organizado en tren. Años atrás George Stephenson había construido la primera locomotora de vapor encargada de arrastrar vagones abiertos al público, la llamada “Locomotion”. Pero, ¿qué historia hay detrás de ese primer viaje?

 

Autora: Cristina Párbole

Ilustrador: Daniel Rodríguez

 

El primer viaje fue organizado por Thomas Cook y el destino de las personas que participaron en él era dirigirse a un mitin en contra del alcohol y sus riesgos, pues Cook estaba convencido que muchos de los problemas que acuciaban a la sociedad del momento estaban producidos por un exceso en su consumo. Consiguió reunir a más de 500 personas y él mismo acordó un porcentaje en la venta de cada billete. El precio estipulado era de un chelín, que incluía el viaje y la comida, y un recorrido de 11 millas. Este viaje fue el preludio de una autentica revolución.

Es probable que en este primer viaje Thomas Cook no obtuviera grandes beneficios, pero su espíritu emprendedor le llevó a ver posibilidades de negocio en la venta de viajes preparados y se lanzó a crear la primera agencia de viajes conocida como “Thomas Cook and Son”.

Se había desatado la locura. Diez años después del primer viaje, Cook consiguió que 165.000 personas acudieran a la exposición universal de Londres, modelo que imitó años más tarde con la de París. Puso de moda los viajes en tren a Suiza y empezó a extender su modelo al continente americano. El turismo había llegado y el ferrocarril se había convertido en su mejor aliado.

Siguiendo el modelo marcado por Cook en 1883 se inauguró el Express d´Orient, cuyo objetivo era conectar París y Estambul. El momento de máximo apogeo llegó en 1930, pasando a ser considerado uno de los trenes más lujosos. Entre sus pasajeros contaba con miembros de la aristocracia, políticos y millonarios. Todo en el Orient Express era de primera calidad: los muebles, los servicios, incluso se contrataban a los mejores cocineros que elaboraban los platos más sofisticados. Sorteando conflictos bélicos y complejas situaciones políticas, el Orient Express siguió funcionando hasta el año 2001, cuando finalmente dejó de circular ante la imposibilidad de competir con los trenes de alta velocidad y las compañías aéreas. Su fama se fue convirtiendo más en leyenda que en una realidad y mucho tuvo que ver en ello la escritora Agatha Christie con su famoso libro “Asesinato en el Orient Express”.

En España, emulando al mítico Orient Express se creó en la década de los ochenta el “Transcantábrico”, cuyo fin es recorrer el norte de la península aprovechando la vía de ancho métrico que permite circular por lugares de difícil acceso para otros trenes. El trayecto va desde San Sebastián hasta Santiago de Compostela y supone un viaje lleno de contrastes que permite conocer a fondo la variedad de nuestro territorio.

Y ahora desde nuestra agencia “Cultur Viajes” te proponemos descubrir esos lugares icónicos del Transcantábrico pero de una forma distinta. Tomando como eje principal su trayecto por la costa Cantábrica utilizaremos diferentes medios de transporte que harán nuestro viaje más ágil y cómodo y nos permitirán vivir una experiencia inolvidable.

Thomas Cook ha pasado a la historia como el pionero del turismo moderno, un visionario que supo ver que viajar debía estar al alcance de todo el mundo y que el mundo debía de ser disfrutado por todos.

¡Qué disfruten del viaje!

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