No tiene la categoría mítica de la Batalla de las Termópilas, pero la pírrica victoria de Soleimán el Magnífico en el castillo húngaro de Szigetvár en 1566 redujo durante décadas la presión otomana en Europa y creó un enigma histórico del que los historiadores acaban de dar nuevas pistas.

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Mapa Soleiman - EFE- 23092013
Soleimán I (1494-1566), el Magnífico y el Legislador, llevaba años extendiendo el poder del Imperio Otomano por el centro y el sureste de Europa, cuando en 1566 llegó con 100.000 soldados a las puertas de del castillo húngaro de Szigetvár. El enclave fortificado, protegido por 2.500 hombres a las órdenes del noble croata Miklós Zrínyi, se encontraba en el camino de Soleimán hacia Viena, ciudad que pretendía tomar tras haber fracasado un primer intento 37 años antes.

Tras un asedio que se prolongó durante dos meses, los turcos ganaron la batalla, pero las bajas sufridas y la cercanía del invierno les obligaron a detener la marcha hacia Viena. El propio Soleimán murió  el 5 de septiembre, tres días antes de que sus tropas finalmente rompieran la tenaz resistencia de los magiares. El viajero y escritor turco Evliya Çelebi, que viajó por Hungría el siglo XVII escribió que el corazón y otros órganos del sultán fueron enterrados en Szigetvár, mientras que el resto del cuerpo fue enviado a Estambul. “Su corazón, hígado, estómago y otros órganos intestinos fueron enterrados allí, en una urna de oro”, narró encondes Celebi.

Los restos del sultán
El paradero del corazón de Soleimán, uno de los sultanes más famosos del Imperio Otomano, ha sido un misterio desde entonces. Ahora, un grupo de investigadores dirigidos por Norbert Pap, de la Universidad de Pécs, ha logrado localizar cerca de Szigetvár lo que laman la “Ciudad Santa de Soleimán”, un conjunto de edificios en el que se cree se encuentra el mausoleo con los restos del sultán. “Se trata de una ciudad hasta ahora desconocida, con límites bien definidos”, anuncia János Kolovics, alcalde de Szigetvár.

La investigación continúa
La localidad donde se han localizado los restos arqueológicos se llama Turbék, una derivación de la palabra turca “türbe”, que significa tumba o mausoleo. El investigador mantiene que la ciudad, construida en la década de 1570 y destruida en la de 1680 es única, ya que “los otomanos en general no construían localidades, sino ocupaban las ya existentes”. Pap reconoce que aún no se ha localizado la tumba y que la investigación continúa, pero que este descubrimiento permite reducir el espacio de búsqueda del corazón de Soleimán.

Gran repercusión
Antes de anunciarse el hallazgo, el experto ha reconocido que le ha sorprendido el interés mediático que ha recibido su trabajo, especialmente en las últimas semanas. “Hay pocos personajes históricos conocidos internacionalmente. Los libros de historia europeos generalmente le mencionan como uno de los más conocidos”, explica sobre las razones sobre el interés que despiertan la figura de Soleimán y la búsqueda de sus restos. En esa tarea, los historiadores han trabajado con fuentes de aquella época, así como en diferentes archivos de Budapest, el Vaticano, Venecia y Estambul.

IMAGEN: Fotografía facilitada por la Universidad de Péc del mapa histórico de la ciudad húngara de Szigetvár, donde murió Solimán el Magnífico en 1566, usado por los investigadores para localizar el paradero del mausoleo donde la tradición dice que fue enterrado su corazón. EFE