Los patios de Córdoba celebran su primer lustro como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad

Los geranios y gitanillas de colores de la Fiesta de los Patios de Córdoba cumplen este año cinco ediciones con el aliciente de formar parte de la lista Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, por ser una expresión arquitectónica, histórica y social única de la cultura de los vecinos de la tierra.

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Los patios de Córdoba celebran su primer lustro como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad

Este año, sesenta recintos de arquitectura histórica y moderna han abierto sus puertas para los visitantes que hasta el 14 de mayo se acercarán a Córdoba y ya acogen desde el pasado martes a los primeros que se quedan maravillados con una experiencia sensorial de olor y color que se remonta a tiempos en los que la vida de las familias giraba en torno a un patio, con un pozo, una pila y miles de flores de colores. Algo tan atractivo que el presidente de la Asociación de Empresarios de Hospedaje de Córdoba (Ahcor), Manuel Fragero, ha manifestado que se debería de desestacionalizar porque, tras su declaración patrimonial por la Unesco, turistas de todo el mundo llegan a hacer casi intransitables -sobre todo los fines de semana- las calles de los barrios más populares, como San Basilio, donde se localizan una decena de los patios más característicos. Precisamente, en la sede de la Asociación de Amigos de los Patios su responsable de comunicación, Teodoro Fernández, cuenta que la mención del organismo internacional ha supuesto “un valor añadido y una mayor proyección internacional de Córdoba“, pero también ha traído “un exceso de turistas que en ocasiones resulta difícil de gestionar y daña el disfrute de los visitantes e, incluso, perjudica a los propietarios“. Por ello, Fernández ha apostado por buscar “un punto de equilibrio” de una de las fiestas más emblemáticas del Mayo Cordobés que pase por un plan que coordine todas las actividades y garantice el disfrute sin ocasionar molestias a quienes durante todo el año se encargan de cuidar cada pequeño detalle, mantener las flores y macetas e incluso hacer excepciones a visitantes que vienen a Córdoba atraídos por esta tradición el resto del año. Por su parte, el Ayuntamiento de Córdoba, para evitar las aglomeraciones, ha dispuesto en la web oficial de la Fiesta de los Patios de Córdoba un mapa con geolocalización que ofrecerá avisos en verde, amarillo y rojo para indicar el nivel de saturación de visitantes en cada una de las seis rutas.

Quien mejor atestigua la magnitud que han tomado los patios cordobeses es Isabel, propietaria desde los años setenta del recinto de la calle Duartas número 2, en pleno barrio del Alcázar Viejo, que ha contado que “hay que mantener día a día el cuidado de cada detalle si quieres mantener un patio bonito y bien cuidado“, de tal forma que, en su caso, ha instalado una fila de árboles en espaldera que se unen visualmente con el bosque de macetas de colores en las encaladas paredes. Este recinto, premiado en alguna ocasión en el concurso municipal, es de arquitectura moderna pero Isabel se ha encargado de recopilar mobiliario antiguo, espejos, palangana de aseo, mecedoras y sillas de enea y elementos en desuso como pilas para lavar la ropa, “algo que, sobre todo, llama la atención a los más pequeños que han nacido ya con las lavadoras y electrodomésticos modernos“. Además del Alcázar Viejo, en el barrio de San Basilio, Regina-Realejo, Santa Marina-San Agustín, San Lorenzo, Santiago-San Pedro y Judería-San Francisco son el resto de localizaciones donde pueden encontrarse estos recintos que durante estos días son apoyados con medio centenar de personas que se encargan de controlar a los grupos de visitantes para intentar que los accesos sean cómodos y se pueda disfrutar de la visita. Recorridos que son amenizados con unas cuarenta actividades musicales, como recitales en el Patio de la Casa de las Campanas y en el Patio del Palacio de Orive, actuaciones de los ganadores del Concurso Nacional de Copla, festivales flamencos y un apartado infantil dedicado al disfrute de los más pequeños. El Mayo Cordobés es el mes por excelencia de la ciudad y los patios suponen la penúltima cita de peso tras la Cata del Vino Montilla Moriles, la Batalla de las Flores y las Cruces de Mayo, un buen momento para visitar la tierra antes de su explosión final con la Feria de Nuestra Señora de la Salud, la última semana del mes.

EFE

IMAGEN: La Fiesta de los Patios de Córdoba, 5 años Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. EFE.