“La Vida”, obra cumbre de la época azul de Picasso, se exhibe nuevamente en Barcelona en una exposición que traza la vinculación de su creación con diversos dibujos preparatorios y el óleo “Azoteas de Barcelona”.
Canal Patrimonio
El director del Museo Picasso de Barcelona, Bernardo Laniado-Romero, ha comentado que “La Vida” (propiedad actualmente del Cleveland Museum of Art), “es la obra más importante que Picasso pintó antes de ‘Les Demoiselles d’Avignon’ y ese cuadro contiene toda la evolución plástica, temática y filosófica de dicho período”.
La investigación llevada a cabo por las conservadoras del museo ha permitido a través de una radiografía de “Azoteas de Barcelona” descubrir una pintura subyacente, en la que aparecen una mujer y un hombre que remiten a una serie de dibujos realizados por Picasso entre 1902 y 1903, pero también a la pareja de “La Vida”.
Entre 1900 y 1904, Picasso efectuó una producción original y prolífica que orquestaba la transición del cromatismo de 1901 hacia el período azul de 1902-1904, pero muchas de las obras realizadas durante aquellos años desaparecieron sepultadas bajo capas de pintura y fueron reconvertidas en nuevas composiciones, como demuestra “Azoteas de Barcelona”.
Paleta cromática
Tras un proceso de examen científico, el descubrimiento de esta composición oculta vinculó definitivamente “Azoteas” con “La Vida”, al tiempo que, como ha dicho Reyes Jiménez, jefa del Departamento de Conservación Preventiva y Restauración del museo y una de las comisarias de la muestra, “confirmaba la persistencia de la característica paleta cromática de 1901, en coexistencia con las monocromáticas obras azules”. “Hemos intentado seguir el rastro creativo del artista entre 1902 y 1903”, ha dicho Jiménez, quien ha recordado que “La Vida” encarna “la conclusión de un fructífero ciclo de Picasso en la ciudad cuando el período azul tocaba a su fin”.
Eslabón principal
Según Jiménez, los estudios técnicos llevados a cabo en los últimos años con la tecnología más avanzada ha permitido identificar otras composiciones subyacentes relacionadas con “La Vida”, y ahora la investigación llevada a cabo desde el Museo Picasso de Barcelona permite concluir que “lejos de ser una creación aislada, podría considerarse el eslabón principal de una cadena de escenas abandonadas en el camino”. Los dibujos previos y las variaciones que Picasso realizó a lo largo del proceso de ejecución de “La Vida”, hoy visibles gracias a su radiografía, demuestran que el artista no tenía una idea precisa de cómo sería la obra. Quizá el eslabón perdido se encuentre en el dibujo “Pareja desnuda”, de marzo de 1903, en el que la posición de la mujer es una variante del desnudo femenino de “La Vida”, y el hombre con barba coincide con el personaje desvelado por la radiografía de “Azoteas de Barcelona”.
La exposición, que estará abierta al público en Barcelona hasta el 19 de enero, supone acabar con cierto malditismo que ha rodeado a “Azoteas de Barcelona”, “injustamente olvidada por la investigación picassiana, a pesar de que fue una de las obras que acompañó a Picasso durante toda su vida y que el Estado francés donó al español en 1991 para que fuera exhibida en el Museo Picasso barcelonés”.
IMAGEN: Un operador de TV toma imágenes de “La Vida” (1903), obra cumbre de la época azul de Picasso que se exhibe nuevamente en Barcelona, en una exposición que traza la vinculación de su creación con diversos dibujos preparatorios y el óleo “Azoteas de Barcelona” (1903). EFE