Notre-Dame du Raincy, la primera iglesia francesa construida en hormigón armado y comparada por la belleza de sus vidrieras con la Sainte Chapelle de París, celebra su 90 aniversario con achaques de la edad y la necesidad de buscar nuevas fuentes de financiación para afrontar su deterioro.
Canal Patrimonio
La historia de este templo arranca en una pequeña comuna al noreste de París, allá por el año 1918. El entonces cura de Le Raincy, el padre Nègre, recibió de un penitente anónimo una sustanciosa suma de dinero con la que decidió construir una nueva iglesia para el pueblo en un terreno que dos benefactoras cedieron.
Los 330.000 francos que donó el feligrés era una cantidad nada desdeñable, pero al mismo tiempo escasa para el propósito del canónigo. En esta coyuntura, hizo su aparición estelar el hormigón armado, un material constructivo novedoso y muy barato. Así, en apenas un años, las obras estaban finalizadas.
Sin embargo, la mezcla de arena, agua y cemento tenía demasiada grava y quedó excesivamente porosa. Con los años, con los cambios de temperatura, aparecieron las grietas. El deterioro del templo, y la mala calidad de los materiales empleados, provocaron años de restauración (1986-1999).
Intervención urgente
Ahora, 14 años más tarde, este monumento francés necesita una nueva puesta a punto a causa de las goteras del campanario que además humedecen el órgano, cuya reparación sería inútil sin solucionar también las filtraciones, por el momento detenidas con precarios tablones de madera. Los cincuenta metros del poroso campanario necesitan pasar una revisión urgente igual que en su día lo hicieron otros muros o las hermosas vidrieras diseñadas por Maurice Denis y realizadas a mano por Marguerite Huré, que permiten que se compare a este templo con la gótica Sainte Chapelle.
En busca del dinero…
El actual párroco, Fréderic Benoist, se lamenta del grave deterioro de la iglesia y de la carestía de las obras que sería necesario realizar. “Me dicen que hay que arreglarla y yo contesto, ‘pues vamos a buscar el dinero'”, cuenta Benoist, quien explica que al estar la iglesia considerada como monumento histórico desde 1966, Patrimonio Nacional costearía el 40 % de la reforma, pero aún serían necesarios 240.000 euros más para abordar todos los gastos.
Más compromiso
Cuando en los años ochenta hubo que dar un repaso a la obra de los hermanos Perret, se creó la asociación R.E.S.T.A.U.R.E.R., un conjunto de ciudadanos del pueblo tanto creyentes como no creyentes que movieron cielo y tierra para conseguir el dinero necesario. A aquello hace referencia el sacerdote cuando afirma que “hace falta gente que se apasione por esta iglesia, que se movilice para conseguir financiación como hace 27 años”. // Construida bajo la necesidad económica y después de haber padecido múltiples reparaciones ahora se encuentra a un nuevo reto cuya aparente falta de solución enfada al párroco: “nos dicen que no hay dinero, pero no es cierto. Lo que ocurre es que está en otros bolsillos. Para cosas como el fútbol sí que hay dinero de sobra.”
IMAGEN: Notre-Dame du Raincy, la primera iglesia francesa construida en hormigón armado y comparada por la belleza de sus vidrieras con la Sainte Chapelle de París, celebra su 90 aniversario con achaques de la edad y la necesidad de buscar nuevas fuentes de financiación para afrontar su deterioro. EFE