ES* Casi doscientos años después de conquistar la práctica totalidad de la península Ibérica, el Islam se replegó hasta las orillas del Duero donde se hizo fuerte intentando contener el avance cristiano. En la antigua frontera o ‘extremadura’ soriana aún se conserva parte del entramado defensivo de atalayas y castillos levantado en el siglo X por los musulmanes.

PT*  Quase duzentos anos depois de conquistar praticamente toda a península Ibérica, o Islã retrocedeu até às margens do Douro, onde se fortaleceu tentando conter o avanço cristão. Na antiga fronteira, ou extremadura soriana ainda conserva-se parte da rede defensiva das atalaias e castelos erguidos no século X pelos muçulmanos.

Atalaya de Uxama. Foto: Arturo Balado. Patrimonio Inteligente S.L

Canal Patrimonio Flumen Durius

ES*  Uno de los puntos más conflictivos de la frontera entre musulmanes y cristianos, en lo que hoy conocemos como la provincia de Soria, tenía su epicentro en la tangente formada por el río Ucero desembocando en el Duero. Al este de ese cruce, un imponente castillo capaz de albergar ejércitos enteros entre sus muros, pretendía controlar el territorio que se extendía a sus pies. Contaba para ello con un entramado de atalayas y fortificaciones menores repartidas por los puntos más estratégicos del sinuoso curso fluvial, e interconectadas visualmente entre ellas para agilizar la comunicación entre los castillos y cualquier punto de la frontera.

El castillo es el de Gormaz, al que ya dedicamos un Patrimonio Duero en el pasado. Su grandeza y su posición, así como la red de atalayas levantada a ambos lados del río durante el siglo X no impidieron el avance de los cristianos, que acabaron haciéndose con buena parte de los emplazamientos de la margen derecha del Duero, como Osma y Gormaz, a pesar de los posteriores intentos de los musulmanes por volver a recuperar este lado del río.

Las fortificaciones moras fueron cayendo en desuso a medida que la frontera iba desplazándose hacia el sur, lo que no ha impedido que algunas de estas atalayas levantadas en tiempos del Califato de Córdoba hayan llegado hasta nuestros días.

Burgo de Osma

Varias de estas se encuentran en los entornos del Burgo de Osma. La primera está localizada sobre un cerro al este del casco urbano junto a un conjunto de construcciones modernas y antenas. Se conserva una torre atalaya de planta circular de unos cuatro metros de diámetro y alzado cilíndrico en un aceptable estado de conservación. Como se es habitual en estas construcciones, está fabricada en sillarejo de caliza trabado con mortero de cal. A la altura del primer piso, a unos 3,5 metros del suelo, aparece la puerta, un vano estrecho adintelado con dos grandes losas que mantienen los goznes originales. En su interior se conservan los mechinales de sujeción de las vigas del segundo piso, ya desparecido. Su ubicación es privilegiada con gran visibilidad sobre otras atalayas del entorno.

Atalaya el Lomero. Foto: Eduvet (CC BY-SA 3.0 ES) 

Al sur del Burgo se conserva otra torre de similares características de más de ocho metros de altura. En ella aún se puede apreciar la disposición en hiladas de la piedra, con aparejo de mayor grosor en la base, así como la impronta del encofrado con el que se levantó la construcción y la existencia de un zócalo a su alrededor. Conserva parte del revoco interior y exterior, encontrándose la parte superior muy descarnada y presentando un gran boquete en su base aunque, como en el caso de la torre anterior, conserva el vano de su acceso elevado y lo que fueron dos ventanas, hoy cegadas.

Ambas torres fueron declaradas Bien de Interés Cultural en enero de 2014. Una protección que no impide el libre acceso hasta sus restos. La torre sur se encuentra en un erial junto a un vértice geodésico, llegándose a ella por un camino que asciende al conocido como alto del Lomero tras cruzar el río Ucero en la carretera entre Osma y Gormaz (SO-164).

Uxama

Sin embargo, una de las más conocidas es la atalaya de Uxama. Esta torre recientemente reconstruida se sitúa en la parte superior del cerro en el que se encontraba la ciudad celtíbero-romana de Uxama Argaela. Construida sobre restos de una vivienda romana, la estructura defensiva nace de una ancha base de sillares irregulares trabados con argamasa, formada por materiales reaprovechados sobre los que se eleva propiamente la torre. Tiene más de seis metros de diámetro con un grueso muro perimetral y mantiene un altura de 11 metros. Al igual que las anteriores, su entrada se elevaba varios metros sobre el suelo, hasta el primer piso, si bien en la actualidad se ha habilitado una escalera metálica para que pueda visitarse el interior como parte del comjunto arqueológico de Uxama. También se aprecia en este piso la terraza desde la que se realizaba la comunicación visual con las otras atalayas.

Atalaya de Navapalos – Foto: Gabecia (CC BY-SA 4,0)

Navapalos

Esta atalaya se encuentra junto a la iglesia parroquial de Navapalos, municipio dependiente del Burgo de Osma localizado en un terreno elevado sobre el Duero dominando un amplio paisaje de vega, sobre todo hacia el norte. La torre de Navapalos, con más de 10 metros de altura y seis de diámetro, es cilíndrica, con una gran berma de cimentación de piedras y una cubierta a un agua. Fue construida como las anteriores con sillares irregulares unidos con argamasa y un revoco de color rosáceo. Interiormente es maciza hasta la altura del acceso y conserva restos de un forjado intermedio.

En la actualidad no tiene uso, pero ha sido utilizada como palomar. Presenta un gran orificio correspondiente al hueco del acceso original, posteriormente sellado y reabierto con una pequeña portilla. El estado de conservación de la atalaya es aceptable, pues se encuentra íntegramente en pie y es posible apreciar en ella las características de este tipo de estructuras de origen musulmán. Esta torre de control tenía contacto visual con el castillo de Gormaz y con otras atalayas del entorno del Burgo, como la de El Enebral, vigilando el punto estratégico del vado sobre el Duero en esta zona.

Atalaya del Enebral. Foto: Eduvet (CC BY-SA 3.0 ES) 

Enebral

La referida torre cilíndrica del Enebral se localiza en un alto conocido como de Los Aros, que controla parte de la vega del Duero. Como la anterior, también tiene una estructura maciza hasta una altura de 1,20 metros, con muros de 1,50 metros de espesor. Exteriormente se presenta enfoscada con mortero de cal. Quedan restos de la puerta, aunque expoliados, y evidencias de haber dispuesto de varios niveles de ocupación. Debido a la pérdida de la cubierta, parte de la estructura baja de sus muros está seriamente dañada.

La atalaya de Torrejalba perfectamente identificada. Foto: almarail.com

Torrejalba

Situada en un alto estratégico para el control visual junto a la localidad de Cubo de la Solana, la Torrejalba domina toda la comarca conocida como Campo de Gómara. Su estructura, aunque bastante abandonada, conserva aún cerca de 10 metros de altura donde se aprecian los antiguos apoyos de sus tres pisos originales. Su acceso se encuentra señalizado, aunque deben tomarse varios caminos hasta ascender al otero en el que se sitúa, y a cuyos pies discurre la Cañada Real y el sendero GR-14, Camino del Duero.

Vista parcial del yacimiento de Uxama, con la atalaya musulmana al fondo. Fotos: Arturo Balado. Patrimonio Inteligente S.L

PT*  um dos pontos de maior conflito da fronteira entre muçulmanos e cristãos, onde hoje conhecemos como a província de Soria, tinha o seu epicentro na tangente formada pelo rio Ucero a desembocar no Douro. Ao leste desse cruzamento, um imponente castelo capaz de abrigar exércitos inteiros ente os seus muros pretendia controlar o território que se estendia aos seus pés. Contava para isso com uma rede de atalaias e fortificações menores espalhadas pelos pontos mais estratégicos do sinuoso curso fluvial e interconectadas visualmente para agilizar a comunicação entre os castelos e qualquer ponto da fronteira.

O castelo é o de Gormaz, ao qual já dedicamos um #PatrimónioDouro há alguns meses. A sua grandeza e posição assim como o conjunto de atalaias levantadas nos dois lados do rio durante o século X não impediram o avanço dos cristãos que acabaram conquistando boa parte dos territórios da margem direita do Douro, como Osma e Gormaz, apesar das posteriores tentativas dos muçulmanos para voltar a recuperar esse lado do rio.

As fortificações mouras foram caindo em desuso na medida que a fronteira ia se afastando rumo ao sul, o que não impediu que algumas dessas atalaias levantadas em tempos do Califado de Córdoba tenham chegado até os dias atuais.

Burgo de Osma

Várias das atalaias encontram-se nos entornos de Burgo de Osma. A primeira está localizada sobre um morro ao leste do casco urbano juntamente a um conjunto de construções modernas e antenas de telecomunicações. Conserva-se uma torre atalaia de planta circular, de uns 4 metros de diâmetro e alçado cilíndrico num aceitável estado de conservação. Como é habitual nesse tipo de construção, está fabricada em silharia de calcário aparelhado com argamassa de cal. À altura do primeiro andar, a cerca de 3,5 metros do solo, aparece a porta, um vão estreito alintelado com duas grandes pedras que mantêm as dobradiças originais. Em seu interior conservam-se os furos de sustentação das vigas do segundo andar, já desparecidas. A sua localização é privilegiada sobre outras atalaias do entorno.

Ao sul do Burgo conserva-se outra torre de características similares de mais de oito metros de altura. Nela ainda pode-se apreciar a disposição das pedras e fileira com aparelho de maior espessura na base, assim como a marca da cofragem com a qual se levantou a construção e a existência de um socalco ao seu redor. Conserva parte do reboco interior e exterior, encontrando-se a parte superior muito desfeita e apresentando um grande buraco em sua base, ainda que, como no caso da torre anterior, conserve o vão do seu acesso elevado e duas janelas, hoje tapadas.

As duas torres foram declaradas Bem de Interesse Cultural em janeiro de 2014, uma proteção que não impede o livre acesso até os seus restos. A torre sul encontra-se em uma terra erma, colada a um vértice geodésico, chegando-se a ela por um caminho que sobe a um lugar conhecido como Alto do Lomero, após cruzar o rio Ucero na estrada entre Osma e Gormaz. (SO-164).

Uxama

Uma das mais conhecidas é a atalaia de Uxama. Essa torre recentemente reconstruída situa-se na parte superior do morro no qual se encontrava a cidade celtibérico romana de Uxama Argaela. Construída sobre os restos de uma casa romana, a estrutura defensiva nasce de uma larga base de silhares irregulares trabalhados com argamassa, formada por materiais reaproveitados sobre os quais se eleva a torre propriamente dita. Tem mais de seis metros de diâmetro com um grosso muro perimetral e mantém uma altura de 11 metros. Assim como as anteriores, a sua entrada se elevava vários metros sobre o solo até o primeiro andar, embora na atualidade se tenha habilitado uma escada metálica para que se possa visitar o interior como parte do conjunto arqueológico de Uxama. Também se aprecia neste andar o terraço no qual se realizava a comunicação visual com as outras atalaias.

Navapalos

Esta atalaia encontra-se junto à igreja paroquial de Navapalos, município dependente de Burgo de Osma localizado num terreno elevado sobre o Douro a dominar uma ampla paisagem de veiga, sobretudo até o norte. A torre de Navapalos, com mais de 10 metros de altura e seis de diâmetro é cilíndrica com uma grande berma de cimento de pedras e um telhado simples. Foi construída como as anteriores, com silhares irregulares unidos com argamassa e um reboco de cor rosácea. Interiormente é maciça até a altura do acesso e conserva os restos de um forjado intermédio.

Atualmente está sem uso, mas foi utilizada como palomar. Apresenta um grande orifício corresponde ao vão do acesso original, posteriormente selhado e reaberto com uma pequena porta. O estado de conservação da atalaia é aceitável, pois está integralmente de pé e é possível apreciar nela as características desse tipo de estrutura de origem muçulmana. Essa torre de controle tinha contato visual com o castelo de Gormaz e com outras atalaias do entorno do Burgo, como a de El Enebral, vigiando o ponto estratégico do cruzamento sobre o Douro nesta zona.

Enebral

A referida torre cilíndrica do Enebral localiza-se em um alto conhecido como dos Aros, que controla a veiga do Douro. Como a anterior, também tem uma estrutura maciça até uma altura de 1.20m, com muro de 1.50 metro de espessura. Exteriormente se apresenta coberta com argamassa de cal. Ainda há restos da porta, embora espoliados, e evidências de haver disposto de vários níveis de ocupação. Devido à perda da coberta, parte da estrutura baixa dos seus muros está seriamente prejudicada.

Torrejalba

Localizada no alto estratégico para o controle visual junto à localidade de Cubo de la Solana, a Torrejalba domina toda a comarca conhecida como Campo de Gómara. A sua estrutura, embora esteja bastante abandonada, conserva ainda cerca de 10 metros de altura onde podem ser apreciados os antigos apoios dos seus três andares originais. O seu acesso encontra-se sinalizado, embora devam ser tomadas várias trilhas até subir ao Otero no qual se situa e a cujos pés se entende a Cañada Real e a trilha GR-14, Caminho do Douro.