ES* Aprovechándose de la llegada de la Corte de Felipe III a Valladolid, el negociante vallisoletano Juan de las Navas mandó construir una casa en la calle del Rastro con el objetivo de alquilársela a quienes acudiesen a la ciudad a remolque de la Administración real. Nada hacía prever que uno de sus inquilinos, un modesto recaudador de impuestos aficionado a la escritura que vivía junto a parte de su familia, inmortalizaría esa casa.

PT*  Aproveitando-se da chegada da Corte de Felipe III à cidade espanhola de Valladolid, o negociante Juan de Las Navas, natural dessa importante localidade espanhola, mandou construir uma casa na rua do Rastro com o objetivo de alugá-la a quem chegasse ao local como acompanhante da Administração real. Ninguém poderia prever, no entanto, que um dos seus inquilinos, um modesto arrecadador de impostos aficionado à escritura, viveria ali juntamente com parte da sua família e imortalizaria essa casa.

Canal Patrimonio Flumen Durius

ES* Miguel de Cervantes, funcionario público y veterano de las guerras contra el Turco, llegó a la capital del Pisuerga en la primavera de 1603, tomando una de las cinco viviendas del edificio de De las Navas que se levantaba tras un hermoso jardín. Allí viviría hasta que en 1606 la Corte volvió a cambiar de sede, ya definitivamente en Madrid. En ella escribiría también algunas de las páginas más ilustres de la literatura universal.

Mientras que la fama del escritor alcanzaba niveles planetarios, la casa pasó totalmente desapercibida hasta que una accidental casualidad la ató al destino de su ilustre ex inquilino. Durante su estancia en Valladolid, Cervantes fue testigo de la muerte en duelo del caballero de Santiago y miembro de la Real Chancillería, el navarro Gaspar de Ezpeleta. Su nombre, junto al de sus hermanas Andrea y Magdalena, el de su hija Isabel, una sobrina y la sirvienta de la casa, aparecía en el expediente del caso, como residentes en el portal número 9, frente al cual ocurrieron los hechos.

Reconocido oficialmente el documento en 1866, en 1875 se crea la Sociedad Artística y Literaria de la Casa de Cervantes, que convierte el edificio en un pequeño museo que perduró hasta 1881, cuando desaparece la sociedad y con ella el museo, volviendo las viviendas a ser alquiladas hasta finales del siglo XIX.

Aspecto de la casa a principios del siglo pasado. Foto: Casa Museo de Cervantes.

El mismísimo rey Alfonso XIII compraría en 1912 la propiedad ya ruinosa de la casa de Cervantes. Mientras tanto, Archer M. Huntington, fundador y presidente de The Hispanic Society of America, se apropió de las casas colindantes con el objetivo de hacer de ellas un museo y una biblioteca, donándolas en 1918 al Estado Español. En el mismo año el Marqués de Vega-Inclán inició la restauración de los edificios junto con Vicente Traver y Eladio Laredo, creando además un jardín interior de carácter simbólico hispánico.

Inauguración

En 1916 se abrió la Biblioteca Popular y Cervantina y por fin, en 1948, se inauguró oficialmente la Casa Museo de Miguel de Cervantes, convirtiéndose además en la sede de la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción de Valladolid. En los 80 fue nuevamente restaurada por Javier López de Uribe.

Se trata de un bloque de cinco casas construidas con ladrillo y sillería. Juan de las Navas heredó parte del terreno que ocupa el conjunto, completándolo con otras parcelas adquiridas en la calle Rastro Nuevo de los Carneros. Las cinco viviendas siguen la misma estructura interna de planta baja, planta principal, segunda planta y buhardilla. Exteriormente la fachada es sencilla, mezclando el ladrillo, el sillarejo y la sillería, y su distribución de puerta, ventana/balcón y vano más pequeño encima sigue el modelo de fachada vallisoletana establecido en el siglo XVI tras un gran incendio acaecido en la ciudad. Los balcones son actualmente de forja volada, pese a que originalmente estuvieron realizados en madera.

 

El jardín delantero es de tipología española. Originalmente contaba con bojes y mirtos, pero su altura y vegetación ha ido variando con el paso del tiempo. En el centro se levanta una fuente clásica con un trozo de mármol escultórico datable en el siglo XVI. Pegado a un edificio anexo se puede contemplar aún parte de la fachada del Hospital de la Resurrección, que fue escenario de una de las obras escritas por Cervantes durante su periodo vallisoletano. En este pario puede verse también la copia de un busto de Vega-Inclán.

En el interior, otro jardín se abre en el antiguo patio trasero, donde quedan restos de la tabiquería divisoria y varios pozos, así como la portada del convento de la Armedilla, de estilo plateresco.

Museo

El museo depende directamente del Ministerio de Educación. En su interior se recrea, con muebles originales del siglo XVII, el aspecto de las distintas estancias (estrado, recibidor, aposento con alcoba, alcobilla, comedor y cocina) como hubieran sido en la casa habitada por Cervantes. La biblioteca se sitúa en la planta baja, junto con el patio interior.

El horario de apertura es de 9h30 a 15 horas, de martes a sábado, y de 10 a 15 horas domingos y festivos. El precio de la entrada es de 3 euros con carácter general, 1,5 euros la entrada reducida (con solicitud previa de 15 días o a grupos de 8 o más personas) y gratis todos los domingos y otros destivos. Tampoco pagan entrada los menores de 18 años y los mayores de 65, así como estudiantes entre 18 y 25 años, los portadores de Carnet Joven, discapacitados, pensionistas, desempleados, miembros de familias numerosas, profesores, guias oficiales de turismo, periodistas, el personal de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales y el de Archivos y Bibliotecas.

PT*  Miguel de Cervantes, funcionário público e veterano das guerras contra o Turco, chegou à capital do Pisuerga na primavera de 1603 e passou a ocupar uma das cinco casas do edifício de De las Navas que se levantava por trás de um belo jardim. Ali viveu até 1606, quando a Corte voltou a mudar de sede, já definitivamente, para Madrid. Nela escreveu algumas das páginas mais ilustres da literatura universal.

Enquanto a fama do escritor alcançava níveis planetários, a casa passou totalmente despercebida, até que uma acidental casualidade a deixou definitivamente conectada ao destino do seu ilustre ex-inquilino. Durante a sua estadia em Valladolid, Cervantes foi testemunho da morte em duelo de um cavaleiro da Ordem de Santiago e membro da Real Chancelaria, o navarro Gaspar de Ezpeleta. O nome de Cervantes e os das suas irmãs Andrea e Magdalena, o da sua filha Isabel, o de uma sobrinha e o de uma empregada da sua casa apareciam no expediente do caso, como residentes no portal de número 9, em frente ao qual ocorreram tais feitos.

Reconhecido oficialmente o documento em 1866, em 1875 criou-se a Sociedade Artística e Literária da Casa de Cervantes, que converteu o edifício num pequeno museu, que perdurou até o ano de 1881, quando desapareceu a sociedade e com ela o museu, voltando as casas a serem alugadas para residências familiares até finais do século XIX.

O próprio rei Alfonso XIII compraria a propriedade em 1912, já ruinosa da casa de Cervantes. Enquanto isso, Archer M. Huntington, fundador e presidente de The Hispanic Society of America apropriou-se das casas vizinhas com o objetivo de fazer nelas um museu e uma biblioteca, doando-as, em 1918, ao Estado espanhol. Nesse mesmo ano, o Marquês de Vega- Inclán iniciou a restauração dos edifícios junto com Vicente Travaer e Eladio Laredo. Além disso, criaram também um jardim interior de caráter simbólico hispânico.

Inauguração

Em 1916 abriu-se a Biblioteca Popular y Cervantina. Em 1948, foi inaugurada a Casa Museu de Miguel de Cervantes, convertendo-se também na sede da Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción de Valladolid. Nos anos 1980 foi novamente restaurada por Javier López de Uribe.

Trata-se de um bloco de cinco casas construídas com tijolos e silleria. Juan de Las Navas herdou parte do terreno que ocupa o conjunto, completando-o com outras parcelas adquiridas na rua Rastro Nuevo de los Carneros. As cinco residências seguem a mesma estrutura interna do térreo, do andar principal, do segundo andar e do sótão.

Exteriormente, a fachada é simples, mesclando os tijolos, o sillarejo, a silleria e sua distribuição de porta, janela/varanda e outra janela menor na parte superior. Segue o modelo de fachada típica de Valladolid estabelecido no século XVI após um grande incêndio que assolou a cidade. As varandas, originalmente confeccionadas em madeira, são atualmente de ferro.

O jardim dianteiro é de tipologia espanhola. Originalmente contava com buxos e mirtos, mas a essa vegetação variou com o passar do tempo. No centro levanta-se uma fonte clássica com um pedaço de mármore escultórico datado do século XVI. Colado a um edifício anexo pode-se contemplar ainda parte da fachada do Hospital da Ressureição, cenário de uma das obras escritas por Cervantes durante o seu período em Valladolid. Nesse pátio também há uma cópia de um busto de Vega-Inclán.

No interior, outro jardim dá ao antigo pátio traseiro, onde estão restos da tabiqueria divisória e vários poços, assim como a portada do convento de la Armedilla, de estilo prataresco.

Museu

O museu depende diretamente do Ministério da Educação da Espanha. Seu interior se representa, com móveis originais do século XVII, o aspecto das distintas estâncias (entrada, recebedor, aposento com alcova, comedor e cozinha) exatamente como foram na casa habitada por Cervantes. A biblioteca está situada no térreo, junto ao pátio interior.

O horário de abertura é das 9h30 às 15h, de terça a sábado, e das 10h às 15h aos domingos e feriados. O custo do ingresso é de três euros com caráter geral, 1,5 euro para os que pagam entrada reduzida (com solicitação prévia de 15 dias ou para grupos de oito ou mais pessoas) e grátis todos os domingos e outros feriados sob consulta. Também não pagam entrada os menores de 18 anos e os maiores de 65, assim como estudantes entre 18 e 25 anos, portadores de Cartão Jovem, pessoas com deficiência, pensionistas, desempregados, membros de famílias numerosas, professores, guias oficiais de turismo, jornalistas, a equipe da Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales e o de Archivos y Bibliotecas.