Proyecto de reconstrucción virtual de las Atarazanas de Valencia y su entorno hacia 1425. Su autor es el historiador del arte y arqueólogo Pablo Aparicio Resco, que lo ha diseñado como proyecto final del Curso de Virtualización del Patrimonio de la UA.
“Si el contexto histórico es fundamental para entender un hecho del pasado, también lo es el contexto espacial para entender un edificio. Por ello, he querido enmarcar el edificio de las Atarazanas del Grao de Valencia en su paisaje original, permitiendo observar las relaciones que mantenía con otros edificios de la época”, aplica Aparicio Resco en la presentación de su proyecto.
Una de las mayores ventajas de las infografías científicas es la posibilidad de aportar una visión de contexto que puede ser difícil de entender si se explica solo con palabras. De ahí que la virtualización cobra una especial importancia a la hora de recrear de forma visual el contexto de los edificios documentados, continúa explicando el historiador y arqueólogo.
La importancia del contexto
Para realizar esta reconstrucción, Aparicio Resco, se ha basado principalmente en la documentación sobre el puerto medieval de Valencia recopilada por Gemma M. Contreras (Contreras 2002) y por Federico Iborra y Matilde Miguel (Iborra y Miguel 2007). El análisis de toda la información enfocado a la creación de la reconstrucción 3D del antiguo puerto de Valencia le ha llevado a recolocar los principales edificios y a establecer sus hipotéticas relaciones espaciales. “He elegido reconstruir el complejo hacia 1425 porque se puede establecer esta fecha como el final aproximado de unas décadas de grandes reformas en el puerto medieval de Valencia que determinan un momento de auge urbanístico en este complejo. Pese a todo, es un espacio dinámico que está en continuo cambio desde el s. XIV a la actualidad”, especifica Pablo.
A este respecto, cabe destacar que el edificio de las atarazanas que hoy se conserva no era una construcción aislada sino que se levantó al norte de la preexistente población de Vilanova del Grao y, poco a poco, se fue convirtiendo en un complejo compuesto por diferentes porches, almacenes, balsas, jardines, corrales, etc. Tanto la villa como el complejo portuario desarrollaron muy pronto un sistema de fortificaciones debido a la creciente amenaza de piratas y saqueadores. “Además de los porches de ladrillo que hoy se conservan (conocidos hoy como las Atarazanas de Valencia), tuvo especial importancia la llamada Casa de las Atarazanas, un palacio-almacén con clara función representativa y simbólica, imagen de la ciudad de Valencia de cara al Mar Mediterráneo”.
Para obtener más información sobre este proyecto puedes consultar en los perfiles de Pablo Aparicio Resco (@archeo y pabloaparicioweb.blogspot.com.es ) y en el Curso de Virtualización del Patrimonio de la UA: @PatrimVirtual y http://www.patrimoniovirtual.com/)
