La exposición dedicada a la colección que José Lázaro Galdiano creó en Nueva York saca a la luz algunas piezas que habitualmente no se exhiben en el Museo y muestra las últimas investigaciones realizadas sobre las piezas que componen esta importante colección.

Canal Patrimonio

Colección Lázaro Galdiano, NY

La exposición se celebra cuando se cumplen sesenta años de la muestra organizada por José Lázaro en el Museo Nacional de Arte Antiga de Lisboa. En ella se mostraba buena parte de las piezas adquiridas por él durante los años de su estancia en Estados Unidos. La muestra ha permitido hacer un trabajo de investigación de esta colección que creó cuando, con casi 78 años, viajó a Estados Unidos “y compró una serie de obras, algunas de ellas joyas fundamentales de la colección del museo”, en opinión de la directora de esta institución Elena Hernando.

Comisariada por Carmen Espinosa, el proyecto tiene dos partes. La primera de ellas la forma la exposición en la que se exhibe una selección de piezas fundamentales, algunas de ellas inaccesibles habitualmente para el público. La otra parte consiste en destacar con cartelas diferentes las piezas procedentes de esta colección que se muestran a lo largo del recorrido por el museo.

Nueva York – Lisboa – Madrid

La comisaria ha recordado que la vida de Lázaro Galdiano dio un giro importante cuando después de quedarse viudo tuvo que viajar a causa de la Guerra Civil a París, donde formó otra de sus importantes colecciones. En el año 39, y ante la situación de inestabilidad en Europa, viajó a Estados Unidos y llegó a Nueva York en 1939 fijando su residencia en el Hotel Pierre de la Quinta Avenida, próximo a las galerías de arte más importantes de la ciudad, al Metropolitan Museum, al Institute of Fine Arts, o la Public Library.

“A los tres meses de estar allí, entró a formar parte del círculo cultural y decidió en 1940 empezar a comprar piezas, lo que deja de hacer a finales de 1944, al decidir volver a España, embarcando su colección, compuesta por más de un millar de piezas, en marzo de 1945″, ha recordado la comisaria.

La colección llegó a Lisboa, donde se exhibió en el Museo de Arte Antiga. Con motivo de esta exposición se hizo un catálogo con 332 piezas que, ya una vez en Madrid, Lázaro Galdiano quiso reeditar en español pero no pudo ya que falleció el 1 de diciembre de 1947.

En el aniversario de esa exposición, el Museo ha decidido reeditar el catálogo en español, aportando las últimas investigaciones sobre las piezas y poniendo al día las catalogaciones. Dicho catálogo está a disposición de todos los interesados en la página web del museo.

Colección Lázaro Galdiano

Piezas destacadas

Entre las piezas que forman la exposición, Carmen Espinosa ha destacado, entre otras, los esmaltes Botkin, que José Lázaro adquirió como obras bizantinas del siglo XI. La comisaria ha señalado que esmaltes similares a estos presentes en otras colecciones se han analizado y se ha comprobado la presencia en sus colorantes de uranio, por lo que no pueden ser bizantinos y se fechan a partir de 1880 “pero siguen siendo unas piezas excepcionales de orfebrería”.

Otras obras importantes son el vaso denominado “Copa del Emperador Rodolfo II“, la talla en marfil “Virgen con el niño“, de origen indo-portugués, una plaqueta realizada para Julio de Medeci cuando era obispo , entre 1513 y 1523, así como una selección de los 810 dibujos que forman parte de la colección de Nueva York.

IMÁGENES: Escultura italiana de la “Madonna Cernazai”, procedente de la colección del magnate W. Randolph Hearst y gran plato con las armas de Felipe III El Bueno, duque de Borgoña, que forman parte de la exposición “Colección Lázaro de Nueva York” que se ha presentado hoy en el Museo Lázaro Galdiano. EFE